La hibernación de las tortugas

By on 17 febrero, 2015
tortoise-02

La hibernación es la capacidad que tienen ciertos animales para adaptarse a condiciones climáticas extremadamente frías que puede asemejarse a un estado de hipotermia regulada durante algunos días, semanas o meses, lo cual les permite conservar su energía durante el invierno. Durante la hibernación el metabolismo de los animales decrece hasta un nivel muy bajo, además de tener una temperatura corporal y una frecuencia respiratoria inferior a lo normal. Durante este periodo utilizan las reservas energéticas almacenadas en sus cuerpos durante los meses más cálidos.

 

Horsfield's tortoise shutterstock_70231024En el caso de las tortugas, en su hábitat natural solo hibernan aquellas que habitan en climas templados o fríos, mientras que las tropicales no lo hacen.

Especies de tortugas mantenidas en cautividad que hibernan (existen muchas otras, esto son solo ejemplos):

– Tortuga de florida, orejas rojas, tortuga de California, orejas amarillas (Trachemys scripta elegans)

– Tortuga rusa (Testudo horsfieldii)

– Tortugas desérticas americanas (Gopherus spp.)

– Tortuga moteada (Clemmys guttata)

– Galápago del bosque (Clemmys insculpta)

– Tortuga caja (Terrapene carolina)

– Tortuga mediterránea (Testudo hermanni)

– Tortuga griega (Testudo marginata)

– Tortuga mora subespecies europea (Testudo graeca spp)

tortuga

Especies de tortugas mantenidas en cautividad que no hibernan (existen muchas otras, esto son solo ejemplos):

– Tortuga de patas rojas (Geochelone carbonaria)

– Tortuga de patas amarillas (Geochelone denticulata)

– Tortuga mora subespecies africanas (Testudo graeca spp)

– Tortuga de espolones (Geochelone sulcata)

– Tortuga leopardo (Stigmochelis pardalis)

– Tortugas de bosque (Rhinoclemmys spp.)

– Tortuga radiada (Geochelone radiata)77114fde7b011e9040ef80a7b05e7529o

Estas especies de tortuga que no hibernan en su hábitat natural, tampoco deberían hacerlo en cautividad. Si tenemos una de estas tortugas en nuestra casa deberemos crearle un microclima artificial en el interior de la casa para que puedan pasar el invierno en buenas condiciones. Especialmente las tortugas africanas, son sensibles a problemas respiratorios por bajas temperaturas.

En el caso de tener una especie que si que hiberna, debemos tener en cuenta de que solo deberian hacerlo los ejemplares adultos, de 3-4 años y sobretodo que estén sanos. Tendremos en cuenta que cada especie está preparada para hibernar en su clima de origen, que puede ser diferente al nuestro, donde el animal vive actualmente (inviernos más fríos, más suaves, más largos, congelación del agua, etc.). Muchas veces deberemos recrear unas condiciones de hibernación artificiales para que puedan hacerlo de forma segura.

En el caso de las tortugas terrestres, es importante proporcionarles un recipiente o un habitáculo con tierra donde puedan enterrarse. Este recipiente puede ser una caja cerrada con pequeños agujeros para favorecer la entrada del aire. La temperatura de hibernación debe ser inferior a 10º y mantenerse estable durante todo el invierno. Lo ideal es hacer la hibernación en un garaje o trastero para evitar las heladas y para mantener una temperatura estable. Dentro de casa, con la calefacción es imposible hacerlas hibernar, al igual que al exterior donde las temperaturas son variables, ya que se podrían despertar si sube la temperatura, congelándose si hay una bajada brusca.

Para preparar la hibernación hay que dejar de suministrarle alimentos unos 10 días antes de iniciarla, para que vacíen el tracto digestivo, ya que la hipomotilidad puede causarle problemas si tiene alimento en el intestino. Para ayudarlas a defecar realizaremos baños con agua templada cada 2-3 días.

Hay que controlar la hibernación, ya que es un proceso muy delicado. Periódicamente deberíamos pesarla, ya que si pierden más de un 10% puede ser perjudicial para su salud y habría que despertarla. En el caso de que la tortuga no esté hibernando correctamente (se mueve o orina) hay que despertarla totalmente ya que puede morir en el proceso. Vigila también que no se deshidrate (es frecuente cuando se hacen hibernar dentro de casa). En ese caso hay que sumergirlas en agua a temperatura ambiente durante un par de horas, secarlas con una toalla o papel y posteriormente devolverlas a la instalación.

Si hibernan en un jardín, hay que controlar que no se inunde o se congele.

En el caso de las tortugas acuáticas necesitan un estanque profundo de al menos 60 cm donde el agua no es tan fría y puedan enterrarse en el fondo. Si no tenemos la instalación adecuada, debemos proporcionarles un acuario con la temperatura controlada para que realicen el proceso con toda seguridad.

El proceso de hibernación dura entre 2 y 4 meses, dependiendo de la tortuga y del clima. No es indispensable que hibernen para poder vivir correctamente, por lo tanto es un proceso que hay que plantearse ya que tiene muchos riesgos. Solo es necesario que hibernen en caso de querer reproducirlas.

SANY0183

La tortuga no debería hibernar en estos casos:

– si hace poco tiempo que la tenemos y desconocemos su estado de salud.

– si es muy joven

– si la tortuga ha sufrido alguna enfermedad grave en los últimos meses

– si está delgada

Cuando las temperaturas empiezan a subir, es hora de despertar a la tortuga de la hibernación. Para ello le daremos baños con agua templada. Es aconsejable llevar la tortuga al veterinario para hacerle un chequeo tan pronto como se despierte.

You must be logged in to post a comment Login